Estamos atravesando un período complicado con la emergencia sanitaria a nivel mundial. Es común ver cómo entramos y salimos de cada fase, según el grado de complicación de la pandemia. Vamos en camino hacia lo que llamamos “una nueva normalidad”
Tratando de ser creativos en estos tiempos, es que se nos ocurrió pensar cómo podemos aprovechar esta situación tan inestable, imaginando acciones concretas para producir cambios que serían de gran relevancia en el tiempo, una vez que pase todo esto… o mientras sucede.
Consideramos que es acertado (entendiendo nuestra realidad) ver qué sucede en otras ciudades de la región, del país y del mundo, para dirigirnos a la solución de los problemas. Por eso, vamos a citar dos casos, de las ciudades de Berlín y Buenos Aires, que aprovechan esta situación de pandemia para que los ciclistas y los peatones puedan ganar el espacio público.
Es el momento para tomar decisiones. En nuestra ciudad podemos hacerlo. Si los gobiernos de todo el mundo nos están cuidando, controlando todas nuestras acciones para evitar los contagios, ¿Cómo no podrían ahora mismo tomar medidas acertadas a favor de la inmediata demarcación de espacios para uso de los peatones y los ciclistas?
Al volver a la normalidad, contaríamos con muchos problemas ya resueltos y que no tendrían vuelta atrás. Las obras ya estarían y la gente comprendería, en su propia experiencia, que es bueno para la salud de los vecinos y para el turismo urbano como actividad sostenible.
Aclaramos que son contenidos originales.